LA CONSEJERIA DE EDUCACIÓN DE MADRID SE RÍE DE LOS INTERINOS Y CIUDADANOS EN LA MESA SECTORIAL.

La mesa sectorial se reunió el lunes 12 con el fin, entre otros, de hablar sobre las oposiciones de Madrid.

La propuesta de la Consejería  es la siguiente: 100 de Inglés, 35 de Física y Química, 30 de Historia, 10 de Latín, 5 de Griego, 5 de Filosofía, 5 de Economía. Además de ser una miseria comparando con las necesidades reales dicha propuesta está muy bien “pensada” en tanto que se pretende “ahorrar” los expertos en ciertas materias. ¿Cómo? Como viene haciéndose este año, pero ya a lo grande: compartiendo especialidad. Así, Matemáticas serán impartidas por profesores que han opositando y preparado para Economía y Física y Química; mientras que Lengua castellana y Literatura, la darán profesores especialistas en Inglés, Filosofía, Historia, Griego y Latín. Es muy triste que una de las materias básicas para el ser humano sea impartida por profesores obligados a hacerlo mientras los especialistas están en el paro. ¡Vaya país!

Pero esto no solo se da en estas dos asignaturas, recordemos el caos que ha reinado este año por una deficiente planificación y unos recortes salvajes: profesores de Lengua dando E.F.  o Francés (¿?), profesores de sociales dando Música y un largo etc. De absurdo que me avergüenza afirmar que están sucediendo.

¿Qué se pretende con toda esta pantomima? Sí, pantomima, pues la Consejería se hace la víctima indicando que se ha conseguido sacar esas plazas a pesar de la crisis porque hay jubilaciones de Magisterio (que da clase en primero y segundo de E.S.O.). Conozco a muchos de Secundaria que van a jubilarse, pero no ha salido su plaza.

Una única explicación cabe a esto: el fin último de esta Comunidad es idiotizar aún más (hace tiempo que lo lleva a cabo) a sus ciudadanos para hacerlos dóciles mientras los maltratan y esclavizan. Para conseguirlo lleva en marcha desde hace años un mecanismo de: difamación y humillación al profesorado (expertos en su tarea, por mucho que haya gente que se crea capaz de llevar a cabo este trabajo y ponerlo en tela de juicio a pesar de que luego no es capaz de acatar la responsabilidad de padre) que ha calado –de manera incomprensible- en un pueblo ignorante; ejercicios dictatoriales de los altos cargos hacia todo el sistema educativo madrileño (selección a dedo de directores, política de la apariencia –valiendo más las estadísticas falseadas que la realidad-, competición por obtener presupuestos para el centro, aunque haya que bajarse los pantalones, presiones y listas negras para profesores que no pasan por el aro; robo del dinero y terreno público para “regalarlo” a empresa privada acólita de los dirigentes de la Comunidad (recuérdese dos casos: el recorte presupuestario público (nuestros impuestos) para donarlo a empresas privadas y los terrenos destinados a centros públicos que han acabado para un concertado en Leganés; propaganda de empresas privadas como mejor que lo público, ocultando el objetivo adoctrinador y el tesoro que va a parar a sus propios bolsillos (especulación); la estafa del bilingüismo que presenta un sistema de falseamiento de la realidad, bajando los conocimientos, los valores y el desarrollo del pensamiento de los futuros ciudadanos ( dóciles, como decía, para el Gobierno); empleo de extranjeros sin conocimientos y, a veces, sin titulación sobre lo que van a impartir; la asociación privada y secta  de “Empecemos por Educar”.

Tras un largo etc., ahora se muestran como héroes que conceden convocar unas oposiciones escasas y mal planteadas. Oiga, usted, o las cosas se hacen bien o no se hacen. Vergüenza de país que desea esto para todo el Estado. ¿Nadie piensa? ¿Nadie tiene conciencia? ¿Nadie vislumbra las consecuencias de todo esto?

Volvemos a la España de la pandereta. Me siento como Antonio Machado (salvando las distancias) ante tanta estupidez.

Os dejo un enlace a "El eterno retorno", una entrada maravillosa de la poetisa Ariadna G. García sobre el mismo asunto.