RELIGIÓN CHINA: EL MITO DE LA CREACIÓN.

C

hina es un amplio territorio de grandes ríos que surcan las inmensas llanuras. Este gran espacio produce numerosas creencias. A pesar de que la mayoría coinciden en presentar unos dioses que simbolizan aspectos de la naturaleza, los cultos no adoraban divinidades, sino que seguían un código moral guiado por principios de relaciones humanas.

Confucio

Tres son las creencias básicas: la que sigue a Confucio (preocupación por las relaciones humanas), el Taoísmo (busca leyes que gobiernan la vida, teniendo  no solo en cuenta la humana) y el Budismo (considerada una religión intelectual).

Según la mitología china, en el principio solo había un oscuro caos, una azabache nada. Como éste resulta un concepto complicado de entender para el ser humano, lo imaginaron como un inmenso huevo. En esa oscuridad surgió el primer ser: Pan Gu, formado por las fuerzas del yin y el yan.

Éste durmió durante años (18.000); sin embargo, cuando despertó, se dio cuenta del caos que lo rodeaba y decidió poner orden. Así  separó, entre otras cosas, la tierra del cielo, sujetándolo gracias a las montañas (algunas versiones indican que es él la montaña).

La primera divinidad que surgió tras desaparecer el caos fue la encargada de la fertilidad: Niu - Kua.

Pan - Gu

En un primer momento, en la tierra convivían los dioses con otros seres, incluidos los humanos (recuerda a la Edad de Oro de la mitología griega), a los que habían modelado con barro (como en las religiones africanas y en la griega).

Los seres humanos están perdidos en ese mundo primitivo, por lo que el dios del fuego, hijo o hermano del dios del trueno, les enseña los usos del fuego, el canto, el baile, la profetización.

El dios del agua (Gong-Gong) y el fuego (Zhu-Rong) entran en guerra. El primero decide suicidarse, por lo que se lanza contra una montaña – recordemos que era uno de los pilares del mundo-; sin embargo, apenas sufre heridas (al fin y al cabo es un dios), mas éstas inundan el mundo y la montaña se quiebra, provocando seísmos. Como consecuencia, la tierra se inclina, con lo que los ríos caen por las montañas y viajan por las llanuras. Otra versión considera que Zhu –Rong vence y el dios del agua se encoleriza tanto que golpea con la cabeza la montaña Buzhou, que se desploma, dejando de sustentar una parte del cielo, que cae.

Todo este sufrimiento da lugar a la creación de la música con el fin de evadirse de los males.

Para algunas versiones, Niu –Kua, apiadada de los seres humanos que había creado a partir del barro (otras consideran que surgimos de las pulgas de Pan Gu, una vez éste muere), arregla todo este caos y sustenta el cielo caído con las cuatro patas de una tortuga gigante que ha matado. Sin embargo, el cielo quedó inclinado hacia el noroeste y la tierra hacia el sureste. Por ello los ríos viajan hacia éste y los astros hacia el oeste.

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